lunes, 16 de marzo de 2009

Como embotar la conciencia de los ciudadanos lazándoles aluviones de información contradictoria.

Algunas tertulias, que se jactan de conformarse con ponentes representativos de pluralidad de cuerdas profesionales de la comunicación, donde se abusa hasta la saciedad de la dialéctica erística –tener razón sin tenerla-, con olvido descarado de la búsqueda de la verdad, no prestan ningún servicio a los bien intencionados seguidores escuchantes o televidentes que aspiran solamente comprender lo que pasa, que no son “cosas menores”, precisamente. Naturalmente, salvando aquellos infelices que lo que buscan es oír lo que quieren oír, de los suyos, al margen de cualquier otra consideración. En definitiva, cuidado con los exhibicionistas circos mediáticos cuya finalidad es endosarle al descuidado seguidor una peligrosa empanada mental.

En estrategia el exceso de datos es un peligro a evitar; produce embotamiento. Es sabido que la saturación de datos, uno tras otro, sin parar, sin digerir, es un arma dialéctica para empanar al oponente. Estoy pensando en aquel ensayo de Ortega titulado Ensimismamiento y alteración: "Sin retirada estratégica a sí mismo, sin pensamiento alerta, la vida humana es imposible". O también el sobado, las hojas no dejar ver el bosque.

La mente del estratega cuida de que los continuos impactos de los primeros planos le deslumbren, como a los conejos en la obscura carretera, con los faros de los coches. Si no se alcanza a percibir el CUADRO GENERAL, no será posible comprender lo qué pasa. Por eso, como decía Ortega en su citado ensayo, Buda se retiró al monte, Mahoma se retiró a su tienda, Jesús se aparta cuarenta días al desierto para nocte dieque incubando.

Se podrían citar centenares de casos, más o menos prefabricados para alimentar este perverso método de empanamiento mental. Pongamos el caso de la estrafalaria comisión de “investigación” –que impudicia en el uso del lenguaje- sobre los espías y demás creatividades mediáticas adheridas. Debate sobrecogedor, crueldad mental cuando sistemáticamente no se atiende nunca el argumentos del contrario. Esta actitud consagrada por los políticos, niega rotundamente el aserto de que de la discusión sale la luz. Cada oponente -nunca mejor dicho- persiste en su opinión, por encima de la razón, porque piensa que para eso le pagan.

Buenos y malos, malos y buenos. Visto lo visto y oído, todos parece una operación fratricida contra la presidenta de la Comunidad de Madrid. Falso objetivo, que traiciona a los ciudadanos que quieren saber. En mi "cuadro general" -las entrañas del animal, los pozos del café- veo un Sansón que grita: "muera Sansón con los filisteos". Así será. Sólo nos queda....la esperanza de que después de la purificación del sacrificio resurja el ave civilizadora de una derecha liberal, siempre acosada por interesados cordones sanitarios, propagados por saltimbanqui subsidiados.

Porque las ideas liberales contienen, verdaderamente, más fortaleza moral y ética que las caducas y destructivas que encarnan los eternos revolucionarios, poblada de mediáticos Ches salva patrias, enardecidos en la toma de bastillas virtuales, permanentes, ilusorias, guardadas por pobres diablos, jornaleros abducidos, que no saben que defiende basura inútil, mientras los asaltantes creen destruir las claves verdaderas. Siempre los dichosos fetichismos, los iconos, el marketing condicionante, los adiestrados perros pastores, que conducen a la ciudadanía en manada. Cada día la tormenta se alimenta a sí misma, por los medios de siempre, con nuevas miserias.

Es posible, querido lector ocasional, que efectivamente, este sea un desahogo frente a tanto embolicante montaje. Pues no se reprima, proteste, aquí mismo, si no está de acuerdo.